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Dayana Jaimovich B.
Bat Mitzvá |
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Hola. Me
llamo Dayana Jaimovich Busel. Mis papás se llaman Raúl y Anat.
Tengo tres hermanos: Dany (23), Jonathan (19) y Luisa (17).
Estudio en el “Liceo Experimental Manuel de Salas”, en 7º “B”.
Los sábados voy a Bet-El.
Mis hobbies son ver televisión, hacer collares de mostacilla, estar
con mis amigos (as), andar en bicicleta, escuchar música y bailar.
Estoy muy feliz de realizar mi Bat Mitzvá porque voy a pasar a ser
una mujer adulta en el pueblo judío y mis responsabilidades van a
ser mucho más grandes. |
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Behar - Bejukotai
En los capítulos anteriores, la Torá nos había
prescrito celebraciones y festividades que componen el ciclo anual y los
días de reposo para las personas.
En los capítulos siguientes, la Torá nos da a conocer “el descanso de
la tierra” que será cada séptimo año. Durante este año de descanso
de la tierra todos los que vivan contigo : familia, servidumbre, animales
y aquel mendigo que viva cerca de ti podrá comer de tu tierra. Tanto
Maimónides como los estudiosos concuerdan que hay consideraciones de tipo
social. Además Ibn Hezra, en su comentario Deuteronomio 31:12, nos
recuerda que la finalidad de este año sabático es liberar al hombre del
trabajo de la tierra para dedicarse a algo más espiritual como el estudio
de la Torá. Inclusive la Torá vuelve al precepto social al contar siete
años siete veces, resulta cuarenta y nueve, y el año cincuenta la tierra
deberá ser devuelta a su propietario primitivo y legítimo. Si éste
hubiera muerte, a sus descendientes.
También se nos habla de que si un hermano nuestro por problemas
económicos debiera venderse como esclavo a un extranjero, uno debe hacer
lo posible por rescatarlo, pues corre peligro de asimilación, ya que su
amo no conoce los preceptos de la Torá.
En “Bejukotai”, el tema es “la recompensa y el castigo”, se da una
serie de leyes de aquellas personas que estando en peligro, prometen donar
parte de sus bienes materiales al Santuario, pero si éstos por algún
motivo no lo pudieren cumplir, deberán ir donde un Cohen y el decidirá
cuanto puede dar dicha persona. También se habla del diezmo que la gente
debe donar al Santuario, pero más allá de los bienes materiales se nos
da el precepto de que el individuo debe estar pegado a D’s, sentir su
presencia y así evitará ser derrotado por sus enemigos y la tierra
tampoco sufrirá castigos como: inundaciones y sequías. Debemos confiar
en D’s, Él nos sacó de Egipto y estando junto a Él nos ayudará en
los momentos de angustia y desesperanza, y alcanzaremos el “Olam Habá”.
Shavúa Tov
Paz Busel A.
Dayana Jaimovich B. |