Maximiliano Grass A.
Bar Mitzvá
Estudio en el Santiago College, en 7º “C”.
Mi deporte preferido es el Squash y mi afición es leer todo lo que llega a mis manos (debo confesar que esta es en realidad mi segunda afición, porque la primera es el computador).
Realizar mi Bar Mitzva es la decisión independiente más importante que he tomado en mi vida y es motivo de gran orgullo para mis padres y para mí.
Gracias por compartir conmigo este momento.
Jaiei Sará
Sará, la primera matriarca del pueblo judío, muere
a los 127 años de edad, y su esposo Abraham la entierra en la cueva de
Majpelá, en Hebrón. Esta propiedad fue adquirida por Abraham a Efrón el
Hitita. La responsabilidad de encontrar una mujer apropiada para Itzjak,
cae sobre Eliezer, el fiel siervo de Abraham, quien va a buscarla de entre
la familia de Abraham y no entre los cananeos. Eliezer viaja a Aram
Naaraim, a la ciudad de Najor, y ruega a D’s que le envíe una señal
por la cual pueda reconocer a la mujer adecuada para Itzjak. Al atardecer,
Eliezer llega a un pozo para dar agua a sus camellos, y allí se encuentra
con Rivká, a quien le pide que le de agua para beber. Rivká no sólo le
da agua, sino que saca agua para sus diez sedientos camellos. Esta
generosidad extrema hace que Eliezer comprenda que ella es la mujer
adecuada para ser la esposa de Itzjak y matriarca del pueblo judío.
Itzjak lleva a Rivká a la tienda de su madre, se casa con ella y la ama.
Este amor lo consuela de la muerte de su madre. Abraham se casa de nuevo
con una mujer llamada Ketura. Ketura tuvo seis hijos, a los que Abraham
manda al este colmados de regalos. Abraham se muere a los 175 años de
edad y es enterrado junto a Sará en la cueva de Majpelá.
Esta es una Parashá muy interesante, ya que aquí se hace referencia
directa a la compra y posterior posesión legal de la tierra de Hebrón,
tan disputada hoy en día.
Por otro lado, vemos la preocupación de Abraham por buscarle a su hijo
una esposa que tuviera valores. Abraham supuso, conociendo la forma en la
que él y Sará fueron criados, que en su lugar natal habría grandes
probabilidades de encontrar una buena mujer para su hijo. Esto nos enseña
que debemos preocuparnos por la educación de valores, ya que estos son
muy importantes en la vida y el mejor lugar para aprender valores es en la
familia.
Shabat Shalom
Maximiliano Grass A.
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